Cuando algo duele mucho, da la sensación que el alma se rompe y queda uno aletargado, como si ya no fuera capaz de sentir nada, absolutamente nada.
Una extraña calma que viene de la sensación de no existir, porque en realidad en ese momento ya no quieres participar de nada, no quieres ser, no quieres estar...
Sakkarah
Y es algo que se repite constantemente, es como caminar en círculos y darte cuenta que volvemos al punto de partida, donde se rompe el alma.
ResponderEliminarBesos, niña
Sí, a mi me está pasando :)
ResponderEliminarMuchos besos, bonita
Forma parte de la vida, y es que aunque no se vea ni se palpe, el alma está y si lo pinchan, duele.
ResponderEliminarBesazo
Y cuando se siente el alma partirse ya nada es igual... creo que la conexión alma-cuerpo es tan sumamente grande e intensa que su ruptura deja mella en la piel... en las ganas de seguir...
ResponderEliminarArrugadita me dejaste el alma al leerte hoy...
Te dejo un montón de mis besinos y un achuchón bien fuerte vale??
Lo entiendo actualmente perfectamente... Un beso desde Murcia....
ResponderEliminarY lo malo de ese sentir, es que no ves la salida, tampoco tienes ganas de buscarla, te falta el estímulo, la ilusión, en fin, es como la pescadilla que se muerde la cola.
ResponderEliminarYo sé algo de esa sensación.
Te dejo cariños en el corazón.
Kasioles
Lo has clavado!
ResponderEliminarUna calma que estremece y hiela el alma
Sí, Maria, duele el alma...
ResponderEliminarMuchos besos
Muchos besinos, Haydeé, guapa, y muchas gracias...
ResponderEliminarEspero que pronto estes super feliz Alp...
ResponderEliminarUn beso enorme.
Muchas gracias y muchos cariños Kasioles preciosa...
ResponderEliminarBesos, mil
Así es MaRía...
ResponderEliminarMontón de besitos.